¡Ya estamos en casa!

Hemos recogido en tiempo record y dado el relevo a otra parroquia que empezaba su campamento allí hoy. En cuanto podamos iremos actualizando los álbumes de fotos con más fotos que están pendientes de subir. Nos volvemos cansados pero muy contentos. Es la paradoja del evangelio: quien pierde su vida la encuentra, por eso este campamento continúa año a año.